lunes, 21 de octubre de 2013

[WCII] Episodio XIX: Ayako

COALESCENCE
WORLDS COLLIDE II
Episodio XIX · AYAKO

La imagen de la pantalla se cortó. Tras ellos, apareció Freya. No tardó en seguirla Aquanika, también mediante teletransporte. Al verlas llegar, Yamiyuki, Metallurgy, Yurika, Nikola y Dalton comenzaron a aplaudir.
Bien hecho, Freya.-la elogió Yamiyuki con una sonrisa-No esperábamos menos de ti.
¡Qué par tienes!-exclamó Yurika.
¡Eres increíble!-afirmó Metallurgy sonriendo.
Gracias a todos.-Freya sonrió-Ahora ya lo sabéis todo al respecto. Bienvenida de nuevo, Aquanika.
¿Quién me iba a decir que esa tía podría ser madre?-susurró Ibara.
Las apariencias siempre engañan.-asintió Itami-Piensa si no en la gente que me acusa de no tener carne, ¡JAJAJAJAJAJAJAJAJA!
¿No tenéis otro tema del que hablar?-les increpó Freya-Aquanika está pasando por un momento muy difícil de su vida.
¿Te vas a preocupar ahora de cómo se sienta cuando ha intentado matarte cientos de veces?-le respondió Itami.
No.-respondió Freya-Es más, yo también he intentado matarla a ella cientos de veces. No obstante, una reina tiene que saber ordenar estratégicamente a sus peones  más útiles. Tenemos a una bruja en el equipo… ¿sabes el juego que da eso?
Tengo una pregunta.-dijo Nikola-¿Cómo puede ser que Aquanika sea una bruja? No tiene la forma ni la dotación de una máquina de tal calibre…
¿Máquina?-Aquanika frunció el ceño-¿De qué coño vas? Soy una persona, ¿de acuerdo? ¿No te quedó claro que soy de carne y hueso el día que casi me tocas una teta cuando nos enfrentamos?
Nikola se ruborizó, bajó la cabeza y ocultó su cara entre su pelo.
El concepto de bruja en nuestros días es un tipo de robot de combate.-susurró Nikola-Al igual que los vampiros y…
¿QUÉ?-saltó Itami-Oye, yo soy un vampiro y hasta ahora nadie me ha demostrado que soy inorgánico.
Calmaos.-dijo Freya-Nikola, dejando de lado el hecho de que me sorprende gratamente que fueras capaz de derrotar a Aquanika en un mano a mano, el lenguaje evoluciona. Volviendo a lo que os contaba sobre la magia, en nuestros días, en la esfera mágica, llamamos bruja a cualquier mujer nacida con el don de la magia. Asimismo, un vampiro es un monstruo antropomorfo capaz de transformarse en murciélago y absorber la sangre de las personas a las que muere.
Exacto.-Aquanika abrió la mano y manifestó una brillante bola de fuego-Ya no tiene sentido ocultar que hago magia. Lo de que ese retaco anoréxico es un vampiro es algo de lo que me habían informado pero nunca he visto…
¿Te has pensado que por haber sido salvada por Freya puedes comportarte como te venga en gana?-le espetó Itami-Sigo teniendo ganas de enterrar mi polla entre tus tetas y, cuanto más me toques los cojones, con más fuerza lo haré.
Cierra el pico, imbécil.-se defendió Aquanika-Nunca me has caído bien…los hombres dais asco y, no sé por qué, tú más. En el fondo me tienes tirria porque tengo las tetas más grandes que tu novia y la única vez que me intentaste tocar una casi te dejo sin mano. No estuviste mucho más lejos de conseguirlo que el melenudo de las alcantarillas…
¡Ya es suficiente, joder!-Nikola dio un puñetazo contra la pared, se levantó y se fue de la sala.
Nikola, espera un momento, por favor.-le pidió Freya taimadamente.
El joven se giró y miró a Freya.
Quiero que tanto tú como los demás seáis testigos de una cosa.-dijo Freya-Terminada la intervención que quiero hacer, podréis iros a vuestros quehaceres.
Se acercó a Aquanika, la cogió del cuello con una mano y la levantó del suelo como si fuese una pluma.
Test psicotécnico.-le dijo Freya-¿Cómo se llama el trozo de piel inservible que rodea al pene?
Hombre.-sonrió Aquanika.
Como esperaba.-Freya le devolvió la sonrisa-Bueno, no esperarías irte de rositas tras incumplir nuestro contrato, ¿no? Lo he renovado y ampliado, pero eso no quiere decir que vaya a eximirte de tu parte.
¿Qué demonios…-se preguntó Aquanika.
Una sonrisa muy sádica se dibujó en la cara de Freya. Soltó una risotada baja y estridente.
Voy a tender una pantalla mágica alrededor porque nunca os he preguntado si os gusta el gore y no quiero causaros ningún trauma.-rió Freya.
Chasqueó los dedos con la mano que tenía libre. Una columna negra las rodeó a Aquanika y a ella. Tras una fracción de segundo de silencio absoluto, se oyó a Aquanika chillar como nunca se imaginarían que lo haría. Freya ahogaba sus agoniosos gemidos en risotadas. No se escuchaban golpes ni nada parecido. Metallurgy se llevó las manos a la boca, Yurika miró hacia abajo, Dalton y Nikola se miraron y, al final, sólo Ibara e Itami quedaban impasibles, observando la escena como si fuera una película, así como Yamiyuki, quien lo observaba todo con una sonrisa de satisfacción que heló el ambiente más aún.
. . .
Los días pasaban. Viajaban, se movían, investigaban, experimentaban, trabajaban. Aprendían unos de otros. El pasado bebía del futuro y viceversa. Tuvieron varios enfrentamientos con los secuaces de Shiroi, Butcher y Lithe, así como con la enigmática pareja formada por Ikaruga y Ayame. Mientras estaban libres de salvar los alrededores de las constantes amenazas, se dedicaban a prepararse más y más para el futuro combate final que tendrían que librar tarde o temprano. Las salas de entrenamiento del edificio no dejaban de ser ocupadas.
¡Concentración!-exclamó Freya mientras bloqueaba una llamarada con su bastón mágico-¡El sentido de la magia está en usar la mente! La mente es la fuente, el catalizador, el amplificador y el emisor de la magia.
Las llamas que Yurika había disparado danzaban haciendo anillos en la punta del bastón de Freya.
Usar la mente en la magia no es igual que usarla en el arte, en la ciencia o en la empatía, por poner ejemplos.-le explicaba Freya-Si bien una actividad intelectual intensa propicia un buen aprendizaje, no servirá de nada si no pones de tu parte. ¡Piensa en la magia como en una forma más de la inteligencia! ¡Mentalízate! ¡La magia no tiene límites a no ser que TÚ los impongas!
Agitó el bastón y devolvió la llamarada, multiplicada en tamaño y en intensidad. Yurika apuntó a la ingente masa de fuego con las palmas de ambas manos y la deshizo con una pared de agua.
Bien hecho.-dijo Freya.
Yurika asintió y lanzó la pantalla contra Freya como si de una ola se tratase.
Mal hecho.-comentó Freya nuevamente.
Agitó el bastón e hizo que un rayo cayera del cielo, destrozando la ola y electrocutando a Yurika, que se había mojado bastante por los chapoteos contra el fuego.
Un combate con magia también requiere de una buena estrategia, como todo.-dijo Freya con dureza-Tendréis que esforzaros más para controlar los poderes de los que disponéis. ¡Voy a por ti, Metallurgy!
Un chorro enorme de electricidad salió de la punta del bastón de Freya.
¡Ay, no!-chilló Metallurgy.
Creó uno de sus aros mágicos e hizo que se tragase los rayos, que comenzaron a aparecer por otro aro a varios metros de ellas.
¡Sabes que cualquier cosa que pueda hacer que mi capa cerámica epidérmica se caliente me supone una debilidad!-se quejó una exhausta Metallurgy.
Precisamente por eso tienes que aprender a defenderte de manera férrea e inexpugnable ante tales debilidades.-le espetó Freya-¿O quieres ser derrotada por algo que sabes e incluso has calculado en tus diseños? ¡La Metallurgy que conozco no se rinde!
Freya volvió a agitar el bastón, lanzando esta vez un chorro de majestuosas llamas formando una hélice.
¡Está bien!-exclamó Metallurgy apretando los puños.
Volvió a hacer que un aro se tragase las llamas, preocupándose de que esa vez el aro que las soltase estuviese detrás de Freya.
Bien hecho.-dijo Freya mientras veía cómo su propio fuego avanzaba peligrosamente hacia ella.
Alzó el bastón e hizo que el fuego bailase elegantemente alrededor de su cuerpo. Lo concentró en una enorme esfera alada de llamas y la lanzó contra el suelo. Metallurgy saltó hacia atrás con bastante altura.
Mal hecho.-observó Freya.
La bola de fuego estalló, provocando un pilar diagonal de llamas que arrolló a Metallurgy y la dejó exhausta en el suelo.
La magia tiene una flexibilidad y complacencia a los deseos del mago tales que puede cambiar de forma dentro de su propia naturaleza de manera infinita.-Freya sermoneaba a sus alumnas-No podéis dejaros llevar por la primera corazonada que tengáis.
Una intensa corriente de viento azotó la estancia, barriendo a Yurika y a Metallurgy. Freya interpuso su mano y desvió el viento a su alrededor, quedando intacta.
Buen intento de ataque sorpresa.-dijo Freya sin ni siquiera mirar a la fuente de aquel viento-¿Quieres unirte al entrenamiento, Aquanika?
Una maga contra una bruja…-dijo Aquanika-… ¿qué puede salir de esto?
Freya le hizo un gesto con la mano para que atacase. Aquanika intentó lanzar un hechizo de manera no verbal, pero su contendiente chasqueó los dedos y la hizo levitar, siéndole imposible moverse en el aire.
Te queda demasiado por aprender.-dijo Freya-El poder en bruto no sirve de nada, parece mentira que todavía no lo sepas.
¡YIAAAAAH!-escucharon que gritaba una voz masculina.
En la sala de al lado está Dalton intentando entrenar a Nikola en artes cíbridas.-dijo Freya-Espero que tenga más suerte que yo. No lo hacéis mal, pero os queda mucho por recorrer…ahora mismo sois como estudiantes novatas de magia y, salvo Aquanika, no sé por qué no podéis extender vuestro dominio a más tipos de magia…bueno, Yurika, ya sabes que tu caso está pendiente de investigación…-le guiñó un ojo.
Paralelamente, Nikola intentaba lanzar un mandoble con su llave fija gigante. Dalton lo paró con una patada, le dio un golpe a la llave con una mano para desarmar a Nikola y, con la palma de una mano, le golpeó en el pecho, alejándolo del arma, que cayó limpiamente al suelo.
Vamos a pasar a nuevos asuntos…-dijo Dalton chasqueando los dedos.
Sus ropas cambiaron al uniforme de artes cíbridas: camiseta roja de cuello vuelto, chaqueta y pantalones de campana con cremalleras automáticas, botas altas.
No me gustan demasiado las artes cíbridas…-dijo Nikola-…prefiero las artes marciales y las herramientas que yo mismo he hecho. Pero…si la situación lo requiere…será mejor que me esfuerce por dominarlas, ¿no es así?
Dalton asintió con una sonrisa y volvió a chasquear los dedos. Las ropas de Nikola cambiaron a un uniforme de artes cíbridas. Era muy parecido al de Dalton, con la salvedad de que la camiseta era de color verde oscuro, los cordones de las botas eran de color verde eléctrico y las tiras que Dalton tenía rojas en el uniforme, Nikola las tenía verdes. Las cremalleras de Dalton eran doradas y las de Nikola, plateadas.
Me quedé con todas las armas de los políticos para darte a ti las que mejor te sirvieran.-dijo Dalton-He instalado el faldón eléctrico en tu gabardina habitual, por lo que creo que será la única de las armas con la que no puedas usar el uniforme. No obstante, veo que se te da mejor la lanza ácida…
Nikola asintió y materializó la lanza de dos puntas entre sus manos. Acostumbrado a blandir la llave fija, el uso físico de ese arma no le resultaba demasiado complicado, pero no le gustaba explorar ni explotar los poderes especiales que poseía. Dalton materializó sus pesadas muñequeras capaces de controlar la tierra y, así, comenzaron a chocar aceros.
¡Hah!-exclamó Ibara-¡HAI!
Lanzaba duras y muy seguidas combinaciones de golpes con su bastón hacia Itami, con quien hacía sparring. Estaban en la misma sala que los otros dos, aprovechando lo amplia que era.
Si me das la mitad de duro ahora de lo que nos damos en la cama…-dijo Ibara-…puede que te dé las galletas que más te gustan…perro famélico…
Será un placer.-dijo Itami con una clara erección mientras sostenía un palo de madera-¡YAAAAH!
Chocaron palos un rato más hasta que se desarmaron mutuamente. Pasaron entonces a lanzarse golpes cuerpo a cuerpo. Ibara comenzó a intercalar posturas muy exóticas seguidas de golpes enrevesados y retorcidos, haciendo especial hincapié con las puntas de los dedos.
Ah…-observó Freya, que se había pasado a la otra sala a ver cómo iba el entrenamiento-…la belleza de las artes marciales árabes. Tú las conoces, ¿no es así?
Desde luego.-afirmó Yamiyuki-Ninguno de ellos lo hace nada mal. ¿Cómo van tus investigaciones mágicas?
Tengo que dar una respuesta definitiva a la pregunta sobre por qué Yurika prendió fuego a la biblioteca con tanta facilidad.-dijo Freya-Además de eso, creo que estoy llegando a una solución que te permitirá vivir con Megami como todos tus ancestros lo hicieron: se te aparecerá físicamente por completo, sin necesidad de ocupar tu cuerpo…o eso espero.
Me alegra oír eso.-Yamiyuki sonrió.
Hoy mismo voy a teletransportarme a los archivos de la universidad de Yurika para ver qué narices pasó.-dijo Freya-Pero antes tengo que intercambiar unas palabras con Nikola. ¿Te importaría hacer sparring con Dalton mientras?
Será un placer.-dijo Yamiyuki-Llevo varios días peleando con él en los entrenamientos y me encanta hacerlo.
¡Nikola!-exclamó Freya-Necesito hablar contigo un momento a solas. Yamiyuki y Dalton se divertirán juntos mientras.
Dalton y Nikola asintieron, volviendo a sus ropas normales. Yamiyuki encaró al chico de cabello rojo y comenzaron a lanzarse golpes mientras Nikola abandonaba la sala con Freya.
Tú me dirás.-dijo el joven.
Antes de nada, quiero felicitarte por tu buen trabajo ampliando las instalaciones subterráneas.-dijo Freya-Ya parece más un imperio que un laboratorio. Muchas gracias por tu esfuerzo y enhorabuena por los resultados.
Ha sido un placer.-Nikola sonrió levemente.
También quiero preguntarte algo…-dijo Freya-…teniendo que pedirte previamente disculpas por la indiscreción.
Nikola torció el gesto.
¿De qué se trata?-preguntó el joven.
Sé que Aquanika es una borde de mierda y no puedo ni procede que me excuse por su comportamiento, pero veo que eres el único que se afecta tanto por ello.-dijo Freya-Aún no nos conocemos muy bien, pero creo que no eres la típica persona que se molesta por todo lo que le dicen…has sufrido muchos años de humillación y, grosso modo, putadas magnas, en esas alcantarillas…tienes que estar muy curtido para esas cosas. Me he fijado que lo que de verdad te molesta es que hagan referencia al hecho de que…eres un hombre…ya me entiendes. No voy a mentirte: soy muy parecida a Aquanika en ese aspecto…repudio a los hombres, pero los reconozco como parte de la naturaleza, de la vida, de la sociedad y, en general, sé relacionarme con ellos. De hecho, me alegra haber conocido a tantos hombres excepcionales a la vez: Yamiyuki, Dalton y tú sois geniales y constituís las excepciones que confirman mi regla, habiendo muy pocos más que puedan jactarse de ello. Lo que vengo a decirte es que no te veo como a un pervertido o a un hombre simple con únicamente deseos sexuales y necesidades fisiológicas y que, si así lo fueras, me daría igual siempre que tuvieses otras cosas: mira a Itami, es un cerdo, pero es superdotado, muy fuerte y muy leal a Ibara, la cual es leal a mí por la fuerza, al igual que Itami, lo cual lo hace a él y justo a él doblemente leal hacia mí. Estarás pensando que doy muchos rodeos, pero quiero hacerte ver que no te he llamado para hacerte daño, sino para intentar ayudarte: ¿qué es lo que te sucede?
Nikola miró hacia el suelo y comenzó a hurgarse en los bolsillos. Sacó una mariposa de plata atada a una fina y brillante cadena del mismo material.
Estoy respondiendo a tu pregunta…-se excusó Nikola-…mira esto.
Tocó levemente el centro de la mariposa con un dedo. De ella salió una luz que proyectó en el aire una imagen en la que se veía a Nikola con una chica. A juzgar por el aspecto del joven en esa foto, Freya intuyó que tendría ya bastantes años, pues el chico se veía mucho más joven, casi como un niño y, aunque ya se le empezaban a notar los músculos, los tenía mucho más pequeños que en la actualidad y parecía raquítico en comparación de tan delgado que estaba. Parecía que ya se estaba dejando crecer el pelo, pues le llegaba casi a la barbilla, y ya por aquel entonces llevaba gafas. Vestía completamente de negro, con una sencilla chaqueta fina de cremallera abierta, una camiseta debajo y unos pantalones rectos. No se veían sus pies. A su lado, y rodeada por su brazo, había una chica de piel muy pálida, unos hermosos ojos de color azul eléctrico y una larguísima melena negra, también vestida de negro con una sencilla minifalda de tablas y un top muy escotado que dejaba intuir que sus senos eran ya muy grandes para la adolescente que tendría que ser.
Te presento a Ayako.-dijo Nikola-La única mujer de mi vida.  Sólo he amado una vez, y lo he hecho con sinceridad. Me he criado en un orfanato junto con ella, que era tan pobre que no tenía ni apellido. Fuimos las únicas personas que nos toleramos mutuamente, el resto tendía a marginarnos…y surgió el amor. Cuando descubrieron que era superdotado me dieron una oportunidad para salir de allí…y decidí llevarme a Ayako a vivir conmigo: todo apuntaba a que íbamos a ser felices, pues ya tenía varias carreras universitarias, trabajo, un buen sueldo, vivienda propia y a mi media naranja…no obstante, la revolución política no tardó en estallar y me hicieron bajar durante años a ese…reservorio…quitándome a mi chica de mis brazos. Nunca la he vuelto a ver…a la persona que se ganó mi corazón, a la única a la que he amado, a la que sigo amando, a la que me hace llorar en silencio con unas lágrimas dolorosamente caudalosas noche tras noche…-Nikola se quitó las gafas para limpiarse las lágrimas-…no te imaginas lo que estoy sufriendo: nunca me dijeron nada de ella y no he podido encontrarla. No aparece en ninguna base de datos, ni siquiera entre las listas de fallecidos…los que me maldijeron, lo hicieron a conciencia. Si no fuera por la ciencia, yo ya me habría muerto de pena y dolor. La ciencia, así como la tecnología, son facetas de mi vida que me permiten investigar, averiguar, saber, conocer, disfrutar…y, no existiendo en mi vida, sólo podría preguntarme dos cosas: el paradero de Ayako y la situación de mis progenitores, pues mi apellido venía conmigo…no me encontraron abandonado, sino que me dieron en adopción con conocimiento de causa. Desde que me despojaron de Ayako, no soporto que me hablen de mujeres, de amor, de sexo o de cualquier otra cosa relacionada. Llámame inmaduro o lo que quieras, pero es demasiado duro para mí, mi amor por Ayako es tan puro como la imaginación dé a mesurar. En el fondo de mi mente, sé que el amor y el sexo son cosas hermosas y naturales, pero me hacen demasiado daño…
Apagó la mariposa y se la volvió a guardar en el bolsillo.
Las mariposas son los animales favoritos de Ayako.-dijo finalmente.
Ya.-dijo Freya-Pues, ¿qué quieres que te diga? Me parece casi delito no haber superado un problema después de tantos años, pero no te lo voy a echar en cara porque has demostrado ser una persona fuerte: a pesar del dolor, de las dificultades y de todo lo que te han hecho, no has dejado de avanzar y de mejorar dentro de tus posibilidades. Insisto en que una persona no es motivo suficiente para vivir así de amargado, pero no puedo imponerte mi criterio ya que a mí la gente me importa una mierda y, para bien o para mal, los demás no sois como yo, pero me gusta que hayas sabido sobreponerte. Espero que algún día resuelvas tus problemas y…si ese día llega mientras seguimos todos juntos…no dudes en pedirnos ayuda si la necesitas. No me mires con esa cara: lo que no te mata te hace más fuerte…
Se escuchó un golpe muy fuerte.
¿Os estáis tomando el sparring demasiado en serio o me lo parece a mí?-Freya se asomó a mirar.
No hemos sido nosotros…-dijo Dalton desde el suelo, entre las piernas de Yamiyuki, que le había hecho una elegante e ineludible presa con ellas.
Me huele a que nos atacan…-dijo Itami.
¡SI UNA ZORRA QUE YO ME SÉ ME BAJARA DEL PUTO TECHO PODRÍA ENTERARME DE QUÉ MIERDA PASA!-oyeron chillar a Aquanika.
Freya chasqueó los dedos, dejando que Aquanika se estampase de cara contra el suelo.
Desde que volvimos de Kyzylorda estás demasiado insoportable.-dijo Freya-¿Tanto te jode que me debas la vida de tu única familia? ¡Pues te aguantas, querida!
¡Son esos dos!-exclamó Metallurgy corriendo hacia los demás-Acabo de mirar por la ventana…
¿Esos dos?-preguntó Freya.
¡Los tales Ayame e Ikaruga!-exclamó Yurika-¿Qué vamos a hacer?
¿Están solos?-preguntó Freya.
Detecto más presencias a su alrededor.-dijo Yamiyuki mientras se preparaba para el combate-No saben de sigilo ni ocultación…
Sois muchos y mucho más fuertes, así que podréis con ellos.-dijo Freya.
¿No vienes?-preguntó Dalton extrañado.
Le dije a Yurika que iba a ayudarle con un problema y es lo que voy a hacer.-dijo Freya-Me marcho a su universidad a recoger pistas: con suerte, volveré para traer pronto lo que quiero y, con ello, podremos aniquilar a esos dos para siempre.
¿Qué te hace estar tan confiada?-le preguntó Ibara.
¿Me has visto dudar alguna vez?-preguntó Freya sonriendo con sorna.
Sin dejar que Ibara le respondiese, desapareció de allí.
Cómo le gusta teletransportarse últimamente…-dijo Ibara.
¡No hay tiempo!-exclamó Yamiyuki-¡Nos están lanzando proyectiles muy pesados desde varios robots habilitados! ¡Id bajando y salid al combate! ¡Están justo en las puertas!
Mierda, han descubierto nuestro asentamiento…-dijo Dalton-…esto ha dejado de ser un lugar seguro.
Tarde o temprano iba a pasar.-dijo Yamiyuki-¡Vamos, todos!
El grupo comenzó a bajar en tropel para salir del edifico, cuyas defensas estaba activando Dalton mediante un programa maestro al que sólo él podía acceder.

2 comentarios:

  1. Están entrenando para su ejército, me gusta como lo hace cada uno. ¿Qué le habrá echo Freya a Aquianika? algo sádico y gore xDD. Estaban demasiado tranquilos, les tocaba acción again :D

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Por supuesto! Una de cal y otra de arena, como dicen... ^^ Lo de Freya...lo dejo a vuestra imaginación ;)

      Eliminar