COALESCENCE
†
WORLDS
COLLIDE II †
Episodio XXIII · EL LABORATORIO
Tras el
implacable laudo de Freya, todos se dirigieron hacia el laboratorio privado que
Aquanika y Pamela compartían y en el que probablemente estuvieron trabajando
hasta el día de la catástrofe. Como el sitio estaba, según la propietaria,
lejos de allí, decidieron que sería mejor utilizar vehículos. Para facilitar el
trayecto, Aquanika se adelantó ella sola en un vehículo que parecía una pequeña
moto voladora. Detrás de ella fueron los demás, repartidos en un par de coches
voladores. Siguieron a Aquanika sin
cuestionarse si los estaba guiando correctamente: más de uno temía que
estuvieran siendo conducidos a una trama urdida por la recientemente descubierta
bruja y Pamela, pero, por petición de Freya, nadie se dejó llevar por esas
sospechas. Finalmente, Aquanika aparcó su vehículo monoplaza y se bajó de él.
Los demás hicieron lo mismo: Freya, que llevaba a Yurika, a Ibara y a Itami aparcó
al lado de Yamiyuki, que conducía llevando a Dalton, a Nikola y a Metallurgy.
¿Qué
mierda es esto?-preguntó Ibara-Estamos en medio del campo…
Éste es
uno de los parques naturales más cercanos a la capital, tanto que se considera
parcialmente como territorio del extrarradio.-dijo Itami-Como no sea un
laboratorio botánico…
Os dije
que os fiaseis de mí.-dijo Aquanika llevándose una mano a la nuca-Mirad esa
puerta.
No me
digas que…-comentó Freya-… ¡un laboratorio oculto!
Desde
luego.-respondió Aquanika-Ni Pamela ni yo estamos por la labor de trabajar a
nuestras anchas de cara al público. Antiguamente esto era un túnel, pero cayó
en desuso y se utilizó su área central para construir el espacio en el que
vamos a entrar, el cual sirvió durante décadas como refugio de proscritos…hasta
que lo compramos y nos montamos ahí abajo un laboratorio de la hostia.
¿Abajo?-preguntó
Yamiyuki-¿Tiene profundidad?
No
demasiada.-respondió Aquanika-Lo veréis ahora mismo.
La
joven de cabello rosa sacó una tablet de uno de sus bolsillos y la conectó
mediante un cable a una pequeña consola que había en la puerta. Encendió a
continuación su aparato de mano y comenzó a pulsar unos botones.
¿Cable
coaxial?-preguntó Freya-Interesante.
Casi.-dijo
Aquanika-Parece coaxial, pero no lo es. Este tipo de cable lo produjo Pamela
expresamente para nuestras aplicaciones, y ahora mismo es un secreto industrial
no disponible fuera de mis manos o de las suyas. La tarjeta de expansión que le
permite a las máquinas usarlo la desarrollé y diseñé yo. Somos las putas amas,
como puedes comprobar.
Y unas
putas a secas también.-siseó Ibara.
No
estás en la mejor posición para decir eso.-respondió Aquanika-Ah, y que sepas
que vi a tu novio despelotándose en público en un antro.
Lo raro
es que alguien NO haya tenido todavía la maravillosa suerte de contemplar tal
belleza.-dijo Itami guiñando un ojo.
Que os
jodan.-concluyó Aquanika apartándoles la mirada-Ya he cargado el código de
desbloqueo. La puerta se abrirá en breves instantes, y se cerrará
automáticamente transcurrido un minuto.
Me ha
gustado la idea del cable.-dijo Freya-Tenéis mentes de buenas ingenieras. Sabía
que seríais un buen partido.
Si te
parece hacemos las conexiones por USB para que pueda llegar cualquier
desaprensivo, conectar la mierda que se le ocurra y pincharnos el sistema de
control de la puerta.-dijo Aquanika-Sería más que patético salir en las
noticias por el hecho de que nos hubiera desvalijado un cualquiera entrando al
sistema desde una PSVita o un teléfono móvil. Además… ¿cómo que seríamos un
buen partido? Pamela ha hecho poco por ti, por suerte para ella… ¿acaso planeas
hacerte con su cable?
No
necesito robar ningún secreto industrial.-respondió Freya-Tengo cientos, sin
exagerar. Además, sería muy ruin e innoble por mi parte hacerlo: si, en un
futuro, quiere patentarlo, está en su derecho.
¿No te
aprovecharías de ella?-preguntó Aquanika sorprendida-¡Qué raro!
¿Te
parece poco lo que le espera cuando la pille?-Freya sonrió-No necesito
levantarle una patente para hundirla en la mierda más pútrida.
Se oyó
un chasquido. Aquanika empujó la puerta y comenzó a bajar una generosa
escalinata que iba iluminándose a su paso. Hizo un gesto para que los demás la
siguieran rápido. El último en bajar las escaleras, que fue Dalton, cerró la
puerta tras de sí. No tardó en bloquearse completamente al son de un pitido de
activación.
No
tengo que recordarlo, creo, pero, por si acaso, os aviso ya: este laboratorio
no es vuestro, no toquéis nada que no os concierna si no queréis que os vuele
la cabeza.-informó Aquanika al terminar de bajar las escaleras.
Nadie
dijo nada. Caminaron por un estrecho pasillo hasta otra puerta. Aquanika
presionó un azulejo falso de la pared, que giró sobre sí mismo y mostró un
interruptor. Al pulsarlo, se abrió una caja de bornes al lado de la puerta.
Sacó varios cables y los conectó a los bornes por un extremo y a una toma común
por otro. Se abrió un pequeño agujero que reveló una última toma, con la que conectó
su tablet y desbloqueó finalmente la puerta.
Los
cables que has usado son otros completamente distintos al que nos has enseñado
en la entrada.-dijo Freya con seguridad.
Muy
observadora.-dijo Aquanika-Pequeños matices, muy pequeños, pero lo
suficientemente magnos como para que uno funcione y los otros hagan que todo
esto salte por los putos aires. Entrad sin tocar nada.
Las
luces del techo se encendieron, mostrando un enorme laboratorio, todo él de
color blanco, tanto paredes como techo y suelo. Estaba lleno de armarios,
vitrinas, estanterías, ordenadores, mesas, máquinas de muchísimos tipos y
varias puertas que probablemente darían a más instalaciones del laboratorio.
Tú nos
dirás.-se aventuró a decir Dalton-Si Pamela ha estado aquí, habrá tocado algo
o, en definitiva, habrá dejado alguna huella aquí de alguna manera.
Aquanika
se dirigió a una mesa, abrió el primer cajón con una llave y sacó varias
carpetas de colores.
Así
es.-dijo la chica-Como el complejo es muy grande, os voy a dejar que comprobéis
algunas cosas. Ya que tocamos todas las ramas de la Ingeniería, creo que os voy
a dejar a cada uno la parte que mejor se os da.
Agradeceríamos
que, en ese caso, nos llamases por nuestros nombres.-dijo Freya-Eres muy dada a
dirigirte a los demás con pronombres o descalificativos.
Aquanika
suspiró.
Nikola,
comprueba los transformadores tras esa puerta.-dijo Aquanika dándole una
carpeta y señalándole la puerta-Yamiyuki, creo que eres adecuado para revisar
si los sistemas de control automáticos de esta sala están fijados a los valores
especificados en los papeles. Metallurgy, echa un ojo en la sala de motores.
Dalton, quiero que compruebes los observatorios. Y…Freya, revisa el centro de
producción de recursos que está detrás de ti. Yo me encargaré del complejo
químico. Todos tenéis una carpeta con especificaciones nominales que, de haber
estado el complejo en reposo desde la última fecha que tengo anotada en el
calendario de trabajo, serían prácticamente igualadas por las condiciones del
instrumental en este instante. Notificad cualquier variación.
¿Qué
esperas encontrar poniéndote a revisar todas las máquinas?-preguntó Ibara.
Podré
reconstruir lo que ha hecho Pamela.-dijo Aquanika-Saber qué ha activado y qué
no ha activado me permitirá deducir qué quería y, por tanto, el sitio al que
podría querer llegar con ello. La conozco bien.
¿Tenéis
tantas cosas y no disponéis de cámaras de vigilancia que te ahorren ese
trabajo?-apostilló Itami.
Se
formatean con cada emisión de señal del control de apertura de la puerta
principal.-dijo Aquanika-Los datos se envían a Alemania, a Ucrania y a
Kazajstán antes de ello y no se pueden consultar desde aquí para maximizar la
seguridad.
Ya.-Itami
arqueó una ceja-Y, no me digas más, no puedes acceder desde las máquinas
personales que llevas contigo.
Claro
que puedo.-dijo Aquanika-Otra cosa es que quiera hacerlo delante de gente ajena
al complejo. Los niños limitaos a esperar callados: tengo unas salas que
revisar.
Ibara,
Itami y Yurika se quedaron inactivos en la sala principal con la única compañía
de Yamiyuki, que había sido destinado a revisar el mismo sitio.
No veo
ningún amago de acceso a registros…-dijo Yamiyuki-…el control es muy robusto,
demasiado para estar dirigiendo la sala de almacenaje. ¿Qué guardarán aquí? Oh,
Yurika, si quieres, puedes venir a ver esto…lo aprenderás en años venideros en
una de tus carreras.
Y
pensar que, de no haber pasado nada, nosotros ya estaríamos a punto de entrar
en la universidad…-dijo Ibara.
Pronto
seremos como ellos.-añadió Itami-La ciencia nos espera.
¡JODIDA
PUTA!-oyeron gritar a Aquanika desde la sala en la que estaba-¡LA VOY A MATAR!
Ibara e
Itami, que eran los únicos ociosos, se acercaron a mirar.
¿QUÉ
MIERDA ESTÁIS MIRANDO?-les chilló-VOY A EJECUTAR A ESA ZORRA.
El
resto del grupo abandonó sus tareas y se acercó corriendo.
Aquanika,
¿puede saberse qué demonios pasa?-preguntó Freya con cara de pocos amigos.
La
joven de cabello rosa, cuyos ojos se habían vuelto amarillos verdosos, señaló
un hueco rectangular muy profundo debajo de una de las máquinas. Parecía que
estaba hecho para guardar algo, pero estaba vacío.
¡Ya
sabemos que ha estado aquí!-gritó Aquanika-¡Ha pasado y ha salido por la puerta
grande! ¡Me ha birlado! En ese hueco guardaba uno de mis últimos inventos y no
sé cómo se las ha ingeniado para robarlo…nunca le dije que lo tenía.
Tal vez
no confiabais lo suficiente la una en la otra.-dijo Yamiyuki-En la industria,
es necesario trabajar únicamente con gente de confianza…
¡Me la
ha jugado!-exclamó Aquanika indignada-¡Esa perra me la ha jugado! ¡Tenía que
haberla matado cuando tuve oportunidad!
¿Por
qué demonios están cambiando de color sus ojos?-preguntó Yurika.
Se me
avivan o se me apagan en función de las ganas de matar que tengo.-le espetó
Aquanika-Me pasa desde que soy una bruja.
Cuanto
más llamativo es el color, más mala hostia tiene, ¿no?-susurró Yurika.
Veo que
lo entiendes.-dijo Aquanika intentando sosegarse-Chica lista.
Tranquilízate.-dijo
Freya-Vamos a encontrar a Pamela y me encargaré de que tenga su merecido. Ya
que has dado tu voto definitivo, la mataré.
¡No!-exclamó
Aquanika-¡Déjamela a mí!
Ya lo
negociaremos.-comentó Freya-¿Hay forma de saber qué rumbo ha tomado después de
coger lo que sea que hubiera ahí?
Debe de
haberla.-respondió Aquanika-¿Habéis registrado algún indicio de actividad
reciente?
Uno de
los transformadores de la serie reductora tiene una función anómala en la corriente
de fallo.-dijo Nikola-El elevador principal, además, está retroalimentando
positivamente un efecto Ferranti creciente y sinérgico.
¿En
cristiano?-preguntó Ibara.
Esto va
a volar por los aires de un momento a otro.-resolvió Freya.
Ya.-dijo
Aquanika-Yamiyuki, ¿qué pollas has hecho con el control? ¿No lo has revisado
bien?
No
tengo la culpa de que utilicéis el control más robusto para un almacén.-dijo
Yamiyuki-Es lógico que los transformadores estén descuidados.
¿QUÉ?-exclamó
Aquanika-¿El robusto va a almacenaje? ¡Esa puta ha cambiado toda la
arquitectura del complejo! ¡Lo ha convertido en una trampa mortal!
Eso
explicaría por qué los motores amenazaban con salir ardiendo.-señaló Metallurgy
con una sonrisa nerviosa.
Venga,
no me jodáis.-dijo Aquanika-Hay que parar esto como sea.
¿Habéis
usado arquitectura móvil para construir el complejo?-preguntó Freya-Dudo que
Pamela se haya dedicado a levantar todos los tramos de paredes, techo y suelo
para cambiar todos los cables ella sola.
Hay
robots operables que permiten cambiar el orden de la instalación funcionando
entre las paredes, sobre el techo y bajo el suelo.-dijo Aquanika-No obstante,
algo me dice que no van a funcionar.
Tocó a
varios botones de uno de los ordenadores, pero no hubo respuesta.
Ha
bloqueado el acceso.-dijo Aquanika-Voy a tener que hackear mi propia oficina…
Escucharon
un ruido.
¿Qué ha
sido eso?-preguntó Metallurgy-Huele a aceite…
Creo
que ha reventado la cuba de uno de los transformadores.-dijo Aquanika-¡Que
alguien limpie el aceite refrigerador antes de que se prenda a la mínima chispa!
¿Y esos
rugidos?-señaló Yurika.
Los
motores se están encabritando, me temo.-dijo Yamiyuki-¿Tenéis reductoras de
emergencia?
Las
tenemos, pero no puedo acceder al control de emergencias.-dijo Aquanika-Habrá que
esperar a que pueda hackearlo.
Preguntaría
si el SCADA ha registrado alguna alarma, pero NO hay SCADA.-dijo Yamiyuki.
Ah…-dijo
Aquanika-… ¿también lo ha mandado a hacer puñetas? Está bien, vamos a tener que
atacar desde varios nudos de la red. Los puntos estratégicos están en el cuarto
de hornos, en el salón de máquinas de fluidos, en la sala principal y en la
celda de ensayos.
Dejádmelo
a mí.-dijo Yamiyuki con determinación.
Sacó de
la bandolera que había llevado consigo un ordenador portátil con la marca de su
empresa. Le conectó un cable de red y le dio el otro extremo a Aquanika.
Pincha
esto donde no puedas estar más segura de que va al conmutador principal.-dijo
Yamiyuki-Voy a salvar este complejo.
No
rechistes.-se adelantó Freya-Quiero que veas bien cómo lo hace para que de una
puta vez abandones tu idea de que es un perro faldero para mí.
Yamiyuki
no medió palabra: comenzó a teclear frenéticamente mientras las instalaciones
se llenaron de ruidos mecánicos.
¡Ha
descongestionado a los robots!-exclamó Aquanika-¡Es jodidamente rápido!
Soy
Yamiyuki Kuroi.-dijo el chico-Esto no es nada para mí.
Ego no
le falta.-comentó Aquanika.
No es
para menos.-dijo el chico-¿Mando el robusto al cuarto de transformadores o lo
distribuyo a todas las instalaciones?
Tiene
una salida de emergencia.-dijo Aquanika-Dirígela hacia los motores YA. ¿Quién
está limpiando el aceite?
Metallurgy
y Nikola corrieron de nuevo a la sala: su ausencia apenas se había notado.
Ya
hemos quitado el charco.-dijo Metallurgy-No obstante, sin un equipo de limpieza
adecuado han quedado restos que pueden significar un incendio en cualquier
momento…
Ya
no.-respondió Yamiyuki pulsando el intro de su portátil una última vez.
Cesaron
todos los ruidos y se hizo el silencio en el laboratorio.
Comprobad
las salas.-dijo Freya-¡Rápido!
¡Los
transformadores han soltado todo el estrés eléctrico!-oyeron a Nikola.
¡Los
motores han vuelto a su rutina!-exclamó Metallurgy-Van a necesitar reductoras
nuevas, pero…
La
alimentación del observatorio ha vuelto a su cauce.-dijo Dalton mientras bajaba
de dicha sala-He podido, gracias a ello, encontrar esto.
Dalton
le tendió un maletín metálico a Aquanika. Llevaba un símbolo que conocía muy
bien y con el que Pamela estaba muy implicada. Abrió el maletín y lo encontró
vacío con unos huecos hechos a la medida de varios objetos.
No
puede ser…-dijo Aquanika.
¿Qué
sucede?-preguntó Dalton.
Pamela
ha usado uno de sus experimentos biológico-genéticos.-dijo Aquanika-El
laboratorio puede estar contaminado…
Me he
fijado en que tenéis sensores que miden con precisión la contaminación
ambiental.-dijo Freya-Están respondiendo adecuadamente, así que no lo creo.
Al
igual que yo ocultaba mi invento de Pamela, ella nunca me mostraba esta
mierda.-dijo Aquanika-Es probable que haya desarrollado algún germen capaz de
burlar nuestros sensores sólo para asegurarse esta trampa…o, tal vez, en el mejor
de los casos, sólo se ha llevado con ella el contenido del maletín.
¿Qué
sucedería si esta sala estuviese contaminada?-preguntó Nikola.
Que
nuestro fin sería inevitable.-respondió Aquanika tajantemente.
Acabo
de cargar un punto de restauración de todos los sistemas.-intervino Yamiyuki-El
SCADA vuelve a funcionar y, ¿a que no sabéis qué? LA PUERTA PRINCIPAL NO EXISTE.
Estamos atrapados, como en las películas…
Tras
terminar la frase, se echó a reír.
¿Te
parece gracioso que Pamela nos la haya jugado a todos?-preguntó Aquanika con
enfado.
No es
eso.-respondió Yamiyuki con una sonrisa-Es sólo que me parece ridículo que haya
quemado todo el sistema de control de la puerta…digamos que lo ha programado
para que se autodestruya al mover la arquitectura interna del complejo, muy en
la línea de los lisosomas de las células de las colas de las lagartijas.
Yamiyuki
está pensando lo mismo que yo.-sonrió Freya.
Si la
puerta no se abre, no hay problema en tirarla abajo.-dijo el chico.
Exacto.-Freya
apretó un puño.
Entonces,
será mejor que nos larguemos de aquí antes de que nos expongamos a más posible
contaminación.-dijo Aquanika-El complejo se va a la mierda, eso está más que
claro: ya no hay confianza entre las propietarias y, con todos los destrozos
que hemos tenido, dudo que vuelva a usarlo para trabajar en condiciones. Cuando
me parezca bien, vengo, lo desvalijo y me voy con mis cosas a donde no tenga
que compartir nada con nadie. Puta zorra…
¿Qué
pasa al final con esa tal Pamela?-preguntó Ibara.
Creo
que ya lo sé todo.-dijo Aquanika-Os dije que leería los movimientos de Pamela
con sus huellas en el complejo. ¡Larguémonos!
Todos
asintieron y se pusieron en marcha, pero, tras abandonar la sala donde se había
producido el robo del invento de Aquanika, fueron sorprendidos por un blanco y
cegador parpadeo.
¿Qué
narices ha sido eso?-preguntó Itami olfateando el aire.
Oh, oh…-dijo
Yamiyuki.
¿Reconoces
esa luz?-preguntó Freya.
Por
desgracia.-respondió Yamiyuki, quitándose la bandolera y dejándola encima de
una mesa-¡Preparaos para luchar!
La luz
blanca volvió a anular sus campos de visión, produciendo una extraña sensación
en sus cuerpos.
Los comentarios de Ibara son geniales y el de Itami... la bomba xDD lo raro es que NO me hayan visto. Ains... Pamela, Pamela... ¿Cuando morirá esa sucia bastarda?
ResponderEliminarPróximamente, más y mejor sobre Pamela ~
Eliminar